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Dresde, la Florencia del Elba

Dresde es una bella ciudad alemana enclavada a orillas del río Elba, capital del estado federal de Sajonia. Una ciudad que envuelve puro arte arquitectónico en sus calles, al igual que un pasado histórico importante. En el tramo final de la II Guerra Mundial, concretamente en febrero de 1945, Dresde fue bombardeada por las fuerzas aliadas causando más de 22.000 muertes y el 80% de la destrucción de su casco histórico. Es ya a finales del siglo XX que los monumentos de la ciudad quedan prácticamente reconstruidos. Si ponemos atención, notaremos la mezcla de antiguo y nuevo en las paredes de muchas iglesias.

Qué decir de Dresde. Si te gusta el arte, te va a encantar. Si no, también.

Casco histórico de Dresde

Cómo llegar

Podemos llegar a Dresde a través de tren o autobús. Mi recomendación es que elijas el autobús. Todas las excursiones que hicimos en el viaje las realizamos en autobús, excursiones desde 2 horas el trayecto hasta 4 horas y media, y te puedo decir que en todas el viaje fue bastante satisfactorio. Los precios suelen ser mucho más baratos que los del tren, y la calidad del transporte es muy alta. No son autobuses normales: los asientos son muy cómodos, ofrecen servicios de comida y bebida, tienen baño, y creo que lo mejor es que la gran mayoría tienen Wi-fi gratuito. Las dos principales compañías que operan en estas regiones son Flixbus y Student Agency/Regiojet. Ambas son muy recomendables y ofrecen servicios similares. Lo mejor es que hagas como nosotros y combines los trayectos según el precio que te ofrezca cada una.

Las estaciones de buses se encuentran en la estación de Florenc en Praga, y la estación central de Dresde. Los precios por trayecto son de 12€.

Casco histórico

El río Elba divide la ciudad en Innere Altstadt (Ciudad Antigua Interior) e Innere Neustadt (Ciudad Nueva Interior). Centrándonos en lo más turístico, lo que realmente visitarás de Dresde es su casco histórico ubicado en Altstadt. Un casco histórico muy pequeño y fácil de recorrer a pie. Nosotros esa mañana estuvimos en Bastei (que te recomiendo muchísimo) y empezamos el recorrido de Dresde por la tarde. Por eso, te puedo asegurar por experiencia que te bastarán tres horas para poder admirar cada esquina, incluso con tranquilidad, a no ser que quieras entrar a los museos y recorrerlos al completo. En ese caso sí te recomendaría que dedicases un día entero a la ciudad.

El casco histórico reúne un conjunto de bellezas arquitectónicas principalmente de estilo barroco que te dejarán sin aliento. No te puedes perder:

· El palacio Zwinger, paraíso del arte con la "Madonna Sixtina" de Rafael y "La muchacha leyendo la carta" de Vermeer como obras insignia.

· La iglesia Frauenkirche, símbolo de la reconstrucción de Dresde.

· La Ópera Semper, donde se estrenaron obras de compositores de la talla de Wagner y Strauss.

· El Desfile de los Príncipes, el mosaico de porcelana más grande del mundo.

La Terraza de Brühl

Terraza de Brühl

Noche en Dresde

Aunque la visita suele ser una excursión de un solo día, te aconsejo que te plantees pasar una noche en la ciudad. Dresde es de esas ciudades que la noche le queda bien. Y muy bien. El atardecer, contrastado con los edificios y las esculturas, es simplemente hermoso. ¿Desde dónde verlo? Para mí no hay ninguna duda. Ves a la Terraza de Brühl, nuestro sitio favorito de Dresde. Por algo le llaman el Balcón de Europa. Es un paseo peatonal con vistas a la arquitectura de la ciudad, al Puente de Augusto que conecta las dos Stadt y al río Elba. Simplemente camina y siéntate en los bancos mientras ves caer la noche en la capital sajona. Mágico.

Una vez llegada la noche, querrás encontrar un buen sitio para cenar. Probablemente querrás probar la gastronomía local en un ambiente especial. Si este es tu caso, te recomiendo el restaurante Pulverturm, ubicado en plena plaza de la Frauenkirche. Es un sitio muy popular en el que sirven gran variedad de platos de cocina alemana y, aunque la comida esté muy bien, realmente te lo recomiendo por el local en sí, ya que está decorado y ambientado con un estilo medieval muy chulo y único. El precio lo considero correcto, nuestra cuenta fueron 36€ para dos platos principales abundantes, dos bebidas y un postre casero muy rico. Como buenos españoles que somos, nosotros fuimos a cenar tarde y por ello y al ser lunes el restaurante no estaba muy lleno, pero es mejor que reserves con antelación por si acaso.

Si prefieres algo más tradicional, no te preocupes. En la calle entre la Terraza de Brühl y la Frauenkirche hay multitud de restaurantes de todo tipo, así como alrededor de la plaza.

Por último, necesitarás un sitio donde pasar la noche. La mejor opción es el hotel, hay muchos a buen precio y con buena ubicación en el centro. No obstante, nosotros nos alojamos en el InterCity, que está enfrente de la estación de trenes, a 15 minutos andando del centro, porque al día siguiente debíamos coger el tren y preferimos tener el hotel cerca para no cargar mucho con las maletas. Pagamos 71€ por una habitación doble con desayuno incluido. Súper recomendable. El hotel es de muy buena calidad, te das cuenta nada más llegas a la entrada.

Si quieres conocer cómo fue nuestra experiencia en la Florencia del Elba desde un punto de vista más cercano, te dejo aquí el video de nuestro día:

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